viernes, 7 de septiembre de 2012

COMO ENCONTRAR LA DIVINIDAD

 

Una vieja leyenda hindú explica que hubo un tiempo en que todos los hombres eran dioses pero abusaron tanto de su divinidad, que BRAHMA, el señor de los dioses decidió quitarles el poder divino, y esconderlo en un lugar donde sería imposible encontrarlo. El gran problema fue encontrarle un escondite.
Entonces los dioses menores, que fueron convocados a un consejo para solucionar ese problema, propusieron esto: "Enterraremos la divinidad del hombre en la tierra". Pero BRAHMA contestó, "Esto no servirá de nada porque el hombre cavará y la encontrará".
Entonces los dioses replicaron, "En éste caso tiraremos la divinidad en lo más profundo del mar". Pero BRAHMA contestó de nuevo y dijo: "No porque tarde o temprano el hombre explorará el fondo de todos los mares y un día la encontrará y la sacará de donde está".
Entonces los dioses concluyeron "No sabemos dónde esconderla, pues no existe sitio en la tierra o en el mar donde el hombre no pueda llegar".
Entonces BRAHMA dijo: "Lo que vamos a hacer con la divinidad del hombre, es esconderla en lo más profundo de él mismo, porque es el único sitio donde no pensará jamás en buscar".
Desde entonces, el hombre ha dado la vuelta a la Tierra, ha explorado, ha escalado, sumergido y cavado, a la búsqueda de algo que está dentro de él.
- Leyenda Hindú -

martes, 4 de septiembre de 2012

RESCATAR LA SONRISA

Hace un tiempo descubrí que existe una enfermedad llamada “ombliguismo” y, poco después, supe que había sido definida como “la tendencia fascinada a contemplar el propio ombligo”.
 
Pero… ¿quién no ha sufrido, en algún momento, de ombliguismo? Todos conocemos los síntomas y, precisamente por eso, cuando vemos que estamos a punto de enfermar, debemos –podemos- cambiar el rumbo. La buena noticia es que el ombliguismo tiene cura. Y, además, es una cura sencilla, al alcance de cualquiera. Se trata de levantar la mirada y ver más allá del propio ombligo.

Lo opuesto del ombliguismo sería… no sé, ¿la empatía?, ¿la generosidad?, ¿el amor?

El otro día recibí un mail de Carlota. No la conozco pero me enviaba (¡¡¡mil gracias!!!) una noticia, que me encantó, para el blog. Se trata de SomosThePosit, un grupo de amigos que reivindican la alegría y los afectos, y cuya propuesta –casi subversiva- consiste en rescatar la sonrisa, la felicidad. Por que sí. Por que no hay mayor milagro que la vida ni mejor experiencia que compartirla. Así que, tras inaugurar la I Internacional Vitalista, se dedican a llenar las calles de su ciudad con mensajes buen rolleros escritos en post its. En una de sus entradas hablan justamente de “lo fácil que es hacer un poco más agradable la vida de la gente”. Lo contrario del ombliguismo, ¿no?

En la misma línea está Anoniman y también Doonited, una página web cuyo lema es “good happens” (las cosas buenas suceden) y en la que la gente cuelga ideas precisamente para eso, para que ocurran cosas buenas a su alrededor. De momento, sólo está en inglés y alemán, espero que pronto también en castellano…

Contra el ombliguismo, sal a la calle y sonríe a la primera persona que te cruces, recoge lo que se le ha caído a tu vecino, haz un recado para tu madre, llama a aquella persona que está deseando oírte, acaricia a tu pareja, ten un detalle con tu compañera de trabajo, abraza a tu hermano, invita a comer a un amigo, extiende la alegría. Y haz tu propia lista. Cada minuto suceden cosas buenas, ¿en cuántas vas a participar hoy?